La industria de servicios globales -offshoring- facturó el año 2012 más de USD 200 mil millones a nivel mundial, en un proceso de crecimiento continuo. Esta industria, que se inició en los '80 con la externalización de los procesos tecnológicos, abarcó posteriormente -y de la mano de las nuevas tecnologías- diversas actividades, como procesos empresariales, de gestión del conocimiento, de investigación e incluso de innovación.
En este sentido, la Conferencia "Deslocalización de servicios y cadenas globales de valor: ¿Nuevos factores de cambios estructurales en América Latina y el Caribe?" fue una buena instancia para dialogar en torno a la externalización de servicios, las oportunidades y desafíos que este proceso implica.
"Es un hecho reconocido -señaló el Rector Víctor Pérez Vera- que la globalización ha alterado profundamente las opciones de desarrollo de los países que integran la comunidad global. Dado que tras esta globalización se esconden desafíos y oportunidades de gran complejidad, la academia ha asumido su responsabilidad para contribuir a mejorar el conocimiento de este fenómeno".
La Universidad de Chile, que este año cumple 170 años, no ha estado ajena a esta preocupación -enfatizó el Rector-, "pues desde las distintas disciplinas que en su interior se cultivan, esta Casa de Estudios ha promovido constantemente poner atención a los desafíos que atraviesa nuestro país, y la necesidad de tomar acciones apuntando a generar cambios importantes en el mejoramiento de la calidad de vida de nuestra sociedad -cultural y económicamente hablando".
En este sentido, relevó el rol que juega el Instituto de Estudios Internacionales, "uno de los pilares al interior de nuestra Institución para la discusión sobre el desarrollo de Chile, con una mirada a largo plazo, donde se asienta, en particular, la preocupación por discutir y evaluar las políticas públicas asociadas con nuestra inserción internacional".
La importancia de la mirada académica
Por su parte, Martin Hopenhayn, Director de la División de Desarrollo Social de la CEPAL, manifestó que a través del offshoring, los países en desarrollo tienen por primera vez la oportunidad de contribuir significativamente a la expansión de la industria de servicios globales, aunque aseguró que hasta ahora la participación de América Latina y el Caribe en esta industria es aún relativamente pequeña.
El Director Adjunto del World Trade Institute, Pierre Sauvé, en tanto, destacó lo importante que es la participación de la mirada académica en estos temas y, en este sentido, valoró la organización de este evento y las instituciones participantes.
La conferencia inaugural estuvo a cargo del Ministro de Economía y Finanzas de Uruguay, Fernando Lorenzo, quien en su ponencia -denominada "Importancia de la industria de servicios globales para el cambio de modelo productivo"- llamó a repensar los marcos regulatorios, los cuales "no fueron pensados hacia la internacionalización". Asimismo, hizo hincapié en la necesidad de avanzar en soporte tecnológico y en la posibilidad que el offshoring abre para los países latinoamericanos de cambiar la mirada hacia los recursos naturales.
"Si el objetivo es crecer para el desarrollo de toda la población, hay que tratar este tema con una lógica muy seria", puntualizó.
Durante las dos jornadas de este seminario se abordaron diferentes enfoques de aproximación hacia este tema, a través de paneles como: La globalización mediante la deslocalización de servicios y cadenas globales de valor; la posición de América Latina y el Caribe en la nueva dinámica de la deslocalización de los servicios; la importancia de los marcos regulatorios para promover los servicios; la participación de PYMES en los servicios globales, y experiencias nacionales y sectoriales en América Latina y el Caribe.
